Politica Fiscal y Reforma Administrativa : el Caso de México
| Author | Gustavo Petricioli |
| Published date | 01 March 1974 |
| Date | 01 March 1974 |
| DOI | http://doi.org/10.1177/002085237404000106 |
| Subject Matter | Articles |
Politica
Fiscal
y
Reforma
Administrativa :
el
Caso
de
México
por
Gustavo
PETRICIOLI,
Subsecretario
de
Ingresos
de
la
Secretaria
de Hacienda
y
Crédito
Público
La
estructura
tributaria
de
un
pais
debe
reflejar
sus
aspiraciones
y
sus
objetivos
econ6-
mico-sociales.
Es
importante,
por
tanto,
que
los
mecanismos
fiscales
sean
los
adecuados
para
que
sirvan
de
apoyo
para
la
consecuci6n
de
los
anhelos
nacionales.
La
planeaci6n
racional
de
los
objetivos
que
persigue
la
politica
tributaria
constituye
una
tarea
de
transcendencia.
El
efecto
de
los
im-
puestos
sobre
el
comportamiento
de
los
di-
versos
sectores
son
determinantes
del 6xito
o
fracaso
de
los
esfuerzos
por
alcanzar
las
metas
de
un
pais.
Por
ello,
la
politica
tributarias
debe
ser
conformada
con
base
en
una
clara
defiNci6n
de
los
objetivos
nacionales
y
de
su
correcta
jerarquizaci6n.
La
complejidad
de
la
dindmica
social
exige
que
la
transformaci6n
de
la
estructura
fiscal
se
produzca
sin
retraso,
para
evitar
distorsiones
que
impidan
alcanzar
los
objetivos
ultimos
de
las
politicas
nacionales.
Asi,
por
ejemplo,
el
sistema
impositivo
debe
acompanar
en
su
evoluci6n
a
la
politica
econ6mica
de
un
pais,
pues de
otra
manera
quedaria
rezagado
y
no
operaria
con
eficacia.
En
los
paises
en
vias
de
desarrollo,
como
es
el
caso
de
M6xico,
la
politica
tributaria
debe
orientarse
a
la
creaci6n
de
una
plataforma
que
permita
la
promoci6n
de
la
actividad
econ6mica
en
todos
sus
aspectos :
propicie
la
redistribuci6n
de
la
riqueza;
facilite
el
mdximo
aprovechamiento
de
la
fuerza
de
tra-
bajo
disponible;
fomente
las
exportaciones
y
permita
obtener
un
flujo
creciente
de
divisas,
todos
ellos
dentro
de
un
proceso
de
desarrollo
econ6mico
arm6nico
y
sostenido.
Conforme
al
orden
juridico
mexicano,
cuyos
principios
emanan
de
la
Revoluci6n
Mexicana,
el
sistema
tributario
debe
contribuir
a
la
reduc-
ci6n
de
las
desigualdades
econ6micas,
tanto
por
lo
que
se
refiere
a
los
ingresos
personales
y
a
la
participaci6n
en
el
ingreso
nacional
de
los
diversos
sectores
productivos,
como
entre
las
diversas
zonas
geogr£ficas
del
pais.
Esto
es
importante
resaltarlo
porque
la
concentraci6n
del
poder
econ6mico
en
pocas
manos,
exige
que
el
Estado
preste
gran
aten-
ci6n
al
planear
su
politica
fiscal,
pues
de
otra
forma
no
se
propiciar£
el logro
de
la
igualdad
social.
En
pocas
palabras,
la
meta
de
la
poli-
tica
tributaria
debe
allanar
el
camino
al
pro-
greso
con
justicia
social,
dentro
de
un
esquema
de
desarrollo
compartido.
Con
estos
criterios,
el
Gobierno
Mexicano
ha
conformado
sus
politicas
de
gasto
y
de
ingreso
en
forma
que
permitan
simultanea-
mente
el
crecimiento
econ6mico
y
que
la
pros-
peridad
y
el
bienestar
lleguen
a
todos
los
miembros
de
la
colectividad.
Los
resultados
obtenidos
nos
permiten
mirar
esperanzados
el
porvenir;
sin
embargo,
aun
persiste
un
marca-
do
desequilibrio
en
la
distribuci6n
del
ingreso,
que
afecta
particularmente
al
sector
rural
y
que
es
acentuado
a
consecuencia
del
creci-
miento
dcmogrifico.
Cuando
corrijamos
esta
situaci6n,
ademds
de
cumplir
con
nuestros
postulados
de
justicia
social,
estaremos
pro-
curando
un
apoyo
s6lido
para
la
expansion
de
la
economia
al
inducir
volumcnes
mayores
de
inversion
y
empleo.
Asi,
pues,
la
politica
fiscal
del
Gobierno
Mexicano
forma
parte
de
su
c6digo
de
principios
economicos
y
es
al
travds
de
ella
que
fomentamos
la
producci6n,
se
alienta
la
actividad
econ6mica
general,
se
estimula
una
mayor
ocupaci6n,
se
induce
al
aprovechamiento
de
los
avances
de
la
tecno-
logia
moderna,
asi
como
se promueve
la
des-
centralizaci6n
de
la
actividad
econ6mica
con
el
prop6sito
de
incorporar
a
la
dinimica
del
pais
las
regiones
hasta
ahora
marginadas.
Desde
luego,
tales
objetivos
se
persiguen
respetando,
en
todo
momento,
nuestro
orden
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